Pollo al ananá curryado

Para este no tengo foto, pero aquí va la idea para 2 personas:

En una fuente para horno enaceitada se ponen los pedazos de pollos (por ejemplo 2 muslos) previamente condimentados (en este caso yo usé simplemente sal condimentada para pollos que según la etiqueta tiene una mezcla de sal, pimentón, romero, ají, curry y canela). Luego cortar unas 4 cebollas en cuartos u octavos y acomodarlas alrededor y/o encima del pollo, dependiendo la forma y tamaño de la fuente. También agregar 1 lata de ananás (de las que vienen en trozos pequeños), guardando el jugo para después. Espolvorear abundante curry por encima de todo y meter en el horno a mínimo. Después de aprox. una hora, dar vuelta los pedazos de pollo, agregar unos chorros de vino y dejar hornear otro largo rato (casi una hora más para mi horno que es demasiado lento, pero supongo que todo se puede acortar con una temperatura mayor).  Sacar del horno, colocar sobre un plato y al jugo que queda en la fuente se le agrega el jugo de la lata previamente mezclado con 1 cucharada de harina y unos buenos chorros de salsa de soja. Calentar sobre la hornalla revolviendo hasta que espese un poco y agregar sobre el pollo. Acompañar con arroz blanco, y si es basmati, mejor...

Pan lactal

Poner en un bol:
1/2 kg harina
1 cda. de sal
2 cdas. colmadas de azúcar
1 paquete de levadura en polvo (aprox. 2 cditas.)
1 chorro de aceite
1 - 1,5 tazas de leche tibia
Unir todos los ingredientes formando una masa. Amasar unos minutos hasta que quede lisa. Dejar leudar unos 30 minutos. Volver a amasar muy bien nuevamente otros varios minutos y formar un cilindro del largo del molde a usar (una budinera). Colocar en el molde y dejar leudar 2 horas por lo menos! (hasta que se vuelva unas 2 veces mayor al tamaño original).
Llevar a horno moderado suave (180°C a 200°C) previamente recalentado y hornear unos 40 minutos. Cuando la superficie toma un poco de color (hacia el final del tiempo de horneado), 
y según me enseñó mi madre, rociarlo con un poco de agua (por ej. con el rociador que se usa para planchar la ropa) mientras está en el horno, para que tome lindo color y no quede tan seco.
 Después de unos minutitos (volver a cerrar la puerta del horno enseguida después del rociado) se puede volver a rociar. Sacar del horno y desmoldar. Dejarlo enfriar un poco antes de cortarlo para que no se desgrane mucho.

Sarma (hojas de parra rellenas)

Esta es una comida típica de los turcos y otros países de la zona... El otro día vino una amiga turca para cocinar juntas, así aprendo a hacerlas... Pero el que quiera hacer tantas como hicimos nosotras, mejor que se tome el día entero! Esta vez traté de sacar fotos de los diferentes pasos, como para que sea un poco más fácil explicar cómo hacerlas... Otra cosa: las cantidades son aproximadas, pues ella lo hace desde hace años y todo a ojo no más.

Todo comienza con las hojas de parra. Aquí se consiguen por ejemplo en paquetes de medio kilo, bien apresaditas y en agua salada. Nosotros hicimos cantidad para 1 kg de carne, entonces necesitamos 2 paquetes, o sea 1 Kg de hojas de parra empaquetadas. Pero obviamente que también se puede hacer con hojas frescas, mucho mejor!

Lo primero que hay que hacer es cocerlas unos minutos en agua hirviendo con un chorrito de aceite de oliva, para que se ablanden (más de lo que ya vienen, pero tampoco tanto que después no se puedan usar...). Luego se enjuagan con agua fría, tratando de separarlas un poquito y se dejan escurrir en un colador.
Mientras se está en este proceso de cocer las hojas, se va preparando el relleno en un recipiente grande con los siguientes ingredientes: 1 Kg carne picada, 250 g arroz lavado (enjuagado un par de veces), 500 g cebollas picaditas, 2 latas de tomates en conserva picados, 4 cdas. de pasta concentrada de tomate y 1/2 taza de aceite de oliva. Todo esto (crudo) se mezcla bien y luego se condimenta con sal, pimienta, perejil, condimento para pizza y pimentón (todo a gusto y a ojo, pero no tiene que estar muy fuerte necesariamente, porque también se hará una salsa...).

Cuando tenemos las hojas de parra y el relleno listos, hay que ponerse a armarlas. Se coloca sobre la mesa hojita por hojita y de la siguiente manera: primero cortarle la ramita (el tronquito) al ras; el reverso de la hoja (el que es un poco más opaco y rugoso, con las nervaduras más marcadas) va para el lado de arriba y con las puntas de la hoja apuntando hacia uno (o sea, el lado donde se cortó el tronquito queda opuesto). Qué complicado explicarlo! Mejor vean las fotos y hagan como les parezca...

Entonces después se coloca un poco de relleno sobre cada hoja y se van enrollando como pueden ver en el videíto.




Dejar sobre una bandeja las que ya están listas, y volver a repetir el proceso con las hojas y relleno restante, hasta que se acabe todo. Si sobra relleno, se puede congelar y/o usar para hacer pimientos rellenos, por ejemplo.

Ahora falta cocinarlas. Nosotros cocinamos sólo la mitad de todas las hojas que habíamos rellenado. Una parte se llevó mi amiga y otra la congelamos. Pero entonces para cocinarlas, poner en una olla bastante grande sobre la hornalla prendida: 1 chorro generoso de aceite de oliva, 2 cdas. de pasta concentrada de tomate, 1 lata tomate de conserva picados, sal, pimienta, condimento para pizza, pimentón y perejil (o sea, exactamente los mismos condimentos que se usaron para el relleno), más 1 chorrito de jugo de limón. Revolver y colocar en forma de círculo las hojas rellenas, como se ve en la foto. Luego se les pone un plato dado vuelta encima y una piedra pesada. Como no tenía ninguna a mano, pueden con qué nos arreglamos. La idea es que haga peso encima y las apriete, para que larguen el jugo y queden más sequitas por dentro. Tapar la olla y dejar cocinar unos 40-60 minutos a temperatura mediana. Cuando están cocidas, se pueden servir con un poco de la salsa y yogur natural. Y también se pueden comer frías.

Me olvidé de sacar foto al plato terminado, entonces pongo una de Aynur, la cocinera.

Fideítos fritos (sin colar)


A estos fideítos en realidad los hago casi igual que como preparo el arroz, por eso no necesitan ser colados. Quedan muy ricos, seguramente gracias a la manteca, que cuanto más se usa, más ricos... La receta es para 2-3 personas. En sí la proporción siempre es la misma: 1 taza de fideitos para 2 de líquido.

En una fuente derretir unos 50-80 g de manteca. Cuando está caliente, agregar 1 taza de fideitos (esos finitos o chiquititos que se usan para sopa por ejemplo, acá uso unos de los turcos) y fritarlos hasta que se pongan bastante marroncitos (algunos más que otros), removiéndolos para que no se quemen los de abajo. Luego agregar 2 tazas de agua caliente y un cubito de caldo (por ejemplo de carne) o en su defecto solamente sal. Bajar el fuego a mínimo y cocinar tapado hasta que el líquido se absorba todo, revolviendo de vez en cuando. ¡Listo!

Muffins saladitas

Mezclar los siguientes ingredientes en un recipiente: 200 g harina, 20 g salvado de trigo, 30 g avena, 1/2 cucharadita de sal, pimienta, pimentón, cúrcuma, orégano, 3 cucharaditas polvo de hornear, 1 cebolla bien picadita, 1/4 morrón picadito, 150 g queso en cubitos y unas 20 aceitunas rellenas cortadas en rodajitas.

Por otro lado mezclar 1 huevo junto con 150 g yogur natural, 100 ml leche, 50 ml aceite (mitad de girasol y mitad de oliva) y unas gotas de limón.

Agregar la mezcla líquida a la otra y revolver sólo lo suficiente para que se humedezcan los ingredientes secos. Repartir en una fuente para 12 muffins y hornear en horno mediano unos 25-30 minutos hasta que estén doraditas.

Bolitas lituanas

Esta receta me la enseñó una amiga de Lituania y aunque a ella hace mucho que no la veo, cada tanto hago las bolitas porque son muy ricas y fáciles de hacer, de paso me acuerdo de mi amiga... Según me contaba, en Lituania son muy comunes y se comen por ejemplo para hacer un plato rápido de cena o como plato de entrada... El pequeño problema puede ser que en Sudamérica no se encuentren los pocos ingredientes que lleva, entonces habrá que darse maña para reemplazarlos por otros...

Para 2-3 porciones se hace una masa (como de ñoquis, bastante pegajosa) con: 250 g de queso quark* (como el mendicrim), 1 huevo y aprox. 1 taza de harina (o simplemente llenando el vasito donde venía el queso). Después de mezclar sin amasar ni nada, armar rápidamente bolitas de 2 a 3 cm de diámetro, espolvoreando las manos con harina para que no se pegotee tanto. Mientras tanto se puede poner a calentar el agua en una olla con un poco de sal. Cuando el agua está hirviendo, echarle las bolitas (cuidado con las gotitas que saltan!). Cuando empiezan a flotar, dejarlas que sigan hirviendo unos 5-10 minutos para que queden bien cocidas (foto de la derecha).

Mientras tanto se hace la salsita poniendo a derretir unos 50 g de manteca en otra ollita. Luego se le agrega 1 vasito (200g) de crema ácida o smetana* y sal a gusto. Eso es toda la salsa! Sólo hay que ir revolviendo de vez en cuando; es bastante líquida.

Cuando las bolitas están listas, se cuelan y se sirven en un platito hondo o en un bol junto con la salsa. Yo por lo general las echo a la olla de la salsa y las sirvo desde ahí, como se ve en esta última foto.

* En wikipedia se puede leer más sobre qué es el queso quark y la crema smetana o schmand, como le dicen acá. Ambos son muy comunes y se encuentran en todo supermercado. En vez de la crema smetana se podría probar de mezclar yogur natural con crema de leche.

Berenjenas al horno

Se puede comer caliente o frío. Nosotros lo comimos acompañando unas milanesitas de pescado. Y el resto frío al día siguiente que también quedó muy rico...

Cortar 2 berenjenas en cubitos y colocarlas en una fuente para horno (si es con tapa, mejor). Por otro lado, a 1 lata de tomate al natural en cubitos agregarle 1 chorro de aceite de oliva, sal, pimienta, mayorán, orégano y ajo en polvo a gusto. Revolver y echarlo sobre las berenjenas (el tomate tiene que estar bastante saladito para que las berenjenas no queden muy insulsas). Cocinar en horno caliente uno 45-60 minutos y con la tapa puesta, sacándolo 1 ó 2 veces para revolverlo, así las berenjenas del fondo también se empapan con un poco de tomate y las de arriba con líquido. Terminar de cocinar destapado. Antes de servir, se puede echar otro chorrito de aceite de oliva y revolver.

La papita de Alfredo

El nombre hace honor a quien me pasó la receta... Es bien fácil, sólo hay que dejarla un buen rato en el horno, aunque también depende de qué recipiente se use... Se puede comer acompañando una carne u otra cosa.

Yo diría que las cantidades se pueden variar a gusto, pero para tener una idea: 4-5 papas ralladas en hebras, 1 puerro picado y 1 tarrito de queso crema (tipo mendicrim) y para condimentar: sal y pimienta a gusto, eventualmente pimentón o ají molido. Todo eso se mezcla bien y se echa en una fuente para horno (por ej. de vidrio) enaceitada. Dependiendo la fuente y cómo de alto quedó el mejunge, cocinar en horno mediano a fuerte 30-50 minutos. En la foto se ve un pedazo ya cocinado. Antes de ponerlo en el horno le eché unos cornflakes para darle otro color... Listo!

Muffins dulces de todo tipo

Este tiempo me agarró la onda de las muffins, así que voy probando hacerlas de diferentes gustos, pero en sí la receta base es siempre la misma. Según leí, la idea es mezclar los ingredientes secos por un lado y los líquidos por otro, y recién a lo último unirlos sin batir. Y si se espera mucho para cocinarlas, puede que la masa no levante mucho ni quede muy esponjosa.

En un bol mezclar los siguientes ingredientes: 2 tazas de harina (común o mezclada con integral), y si se quiere también una 1/2 taza de algún otro ingrediente como avena, germen de trigo, etc., 1 taza de azúcar, 2 cucharaditas de polvo de hornear y 1/2 cucharadita de bicarbonato. Luego también lo que uno quiera para darle el toque particular a la muffin (más o menos 1 taza o si es algo en polvo unas 2 cucharaditas, bueno más que nada guiarse por el sentido común): trocitos de chocolate, nueces picadas, frutas secas, coco, cacao, café, canela, etc. Si son frutas frescas, entonces recién se agregan a lo último de todo, cuando ya se mezcló todo con lo líquido.

En otro recipiente separado mezclar: 1 taza de leche (o yogur, cuajada, etc.), 1/2 taza de aceite (variantes: manteca, margarina media derretida, crema, etc.), 1 huevo y si hay algo líquido para darle gusto, entonces un chorro (esencia de vainilla, vino, oporto, etc.).

Ahora se echa lo líquido a lo seco y se revuelve sólo lo suficiente para que todo se humedezca. Queda una masa bastante chirle. Para acabar, se reparte la masa en la fuente muffinera (previamente enmantecada o con pirotines) llenando hasta un 3/4 del huequito. Si se quiere agregar una sorpresita en el centro (pedazo de chocolate, nuez, dulce, crema de algo, bombón, etc.) entonces poner un poquito de masa, la sorpresita y cubrirlo con masa nuevamente, o bien directamente arriba de todo empujando con el dedito.

Cocinar a 180°C (horno moderado tirando a suave) unos 20 minutos. La cobertura o decoración queda también a cargo de cada uno: nada, chocolate, dulce de leche con coco rallado, alguna crema, azúcar impalpable, etc.

Las muffins de las fotos: la primera fue con las variates cacao, café en polvo y pedacitos de chocolate en lo seco; esencia de vainilla en lo líquido, y cobertura con dulce de leche y coco. La segunda tiene pedacitos de chocolate y azúcar morena, sin cobertura.

Quienes prueben usando harina leudante (acá no existe) supongo que igualmente no deberían olvidar el bicarbonato para que levante un poquito más... Después me cuentan!

Postrecito rápido


Aquí usé uno de esos postrecitos (pudding) instantáneos que vienen para preparar una porción y que se hacen agregando el polvito en una taza de leche caliente y revolviendo bien rápido hasta que se disuelva. Esta es mi variación de hoy para agrandar un poco la porción...

Hacer el postrecito (de vainilla) con más leche de la indicada (no sé si todas las marcas usan la misma cantidad de leche, yo usé unos 200 ml en vez de 150 como tenía que ser). Agregarle 2 cucharadas de coco rallado y 2 de germen de trigo (sí! encontré por ahí y se lo agregué) y revolver bien. Cortar 1 banana en rodajas y distribuirlas en un bolcito. Echarle encima 1 chucharada de dulce de leche y luego el postrecito, que todavía está calentito. Darle unos segundos de tiempo para que el dulce se ablande y revolver un poco para que se distribuya. Listo! El que todavía lo quiera decorar, que le agregue lo que se le ocurra, sinó... a disfrutar!